Espectáculo realizado por en cargo del Ayuntamiento de Oropesa para conmemorar el cuarto centenario del ataque pirata a la ciudad, acaecido en un fatídico 3 de octubre de 1619 y en el que dos galeras berberiscas tomaron la ciudad a sangre i fuego, acabando con la vida de 47 vecinos de la localidad.
El evento fue concebido como una experiencia inmersiva en la que los espectadores formaron parte de un espectáculo que incorporó teatro, acrobacias, efectos de luz y sonido y que finalizó con un impresionante castillo de fuegos artificiales, a cargo de Ricardo Caballer.